Mayo cuéntame una historia

Eran las... bueno francamente no recuerdo ni que hora era, supongo que era una hora adecuada, que no pudo haber sido en otra ocasión o de alguna otra forma, pero reitero sólo supongo...
Ahora estoy confundido, odio suponer, es algo tan impreciso, bueno eso obvio, pero ya en serio es tan carente de lógica, tan inseguro, tan incuantificable, que les juro que me hormiguea la piel de saber que no entiendo las cosas.
Estaba en la oficina, tal vez durmiendo o quizá realmente trabajando, y  llego, llego una notificación, nada del otro mundo el móvil suena, el mundo continua y yo sigo tan impresente como la imaginación me lo permita. Era una solicitud de amistad, vale, "amistad", entiendo que las redes sean "sociales", pero vamos quien llega y te dice: "Hola, me llamo Lluvia Luna Gonzales, tengo 25 años, me gusta(...), escucho(...), veo(..) y quiero ser tu amiga", realmente quizá nadie, pero no voy a discutir si debiese decir "Fulanita que agrego como conocido en Facebook". El punto es que paso, paso como despertar y tener húmeda la almohada de saliva, como tomar un puto café del oxxo y quemarte la lengua, como pisar una mierda de perro por ir caminado con prisa, como quedarte dormido en clase por irte de borracho la madrugada de ese día, paso como pasa cualquier cosa.
Saben me es tan hilarante aquella imagen donde esta la solicitud de amistad y dice algo así como: "Todo empezó así y termino de esta forma" para citar una segunda imagen donde se ve que el perfil ya no existe, me parece que así todo empezó, no como la imagen, si no como una solicitud simplona, pero al fin y al cabo comenzó. Platicamos un poco, nunca espero sorprenderme de la gente, comúnmente me dicen que soy inteligente, diferente, especial, educado(...) pendejadas así. No me lo tomen a mal, pero por la horrible persona que soy eso ya me aburrió, la verdad si sueño con alguien... pues alguien... quizá no una erudita, pintora, tapatia, orgánica, maoista, poeta, con sentido social y gusto por la trova. ¡Puta! que eso sería como una hipster no mainstream o un pedo así, insoportable. Sólo soñaba con alguien diferente, fuera del molde, quizá de sangre tapatia y ojos bonitos, con gustos musicales que no me fueran tan desconocidos y contestaciones tan naturales y tan relajadas que pareciese que el mundo no le afectara.
Creo que Dios me escucho o al Diablo le dieron ganas de burlarse, seguro que fue lo último, quizá hasta Dios andaba de jaibol y dejo a su compadre a cargo, en fin estaba ella tan simple que de repente comenzó a impresionarme con su forma de ser, bueno su supuesta, uno nunca sabe que tan real es menos por inbox, pero lo logró. Obvio supongo que ella no lo deseaba, ahora menos creo que lo desee, pero en el momento paso.
Hace no se cuanto que los demonios que cuelgan de mi espalda terminaron de comer mis alas, al principio me daba comezón, supongo que mis alas nunca tuvieron razón de ser, quizá me salieron a lo pendejo o mejor dicho salí muy pendejo y nunca las supe usar, sea como fuere a lo largo de estos años los demonios se entretenían comiéndolas. Esa madrugada se acabaron lo que quedaba de ellas, comenzaron a morder mi espina dorsal, alcanzaron a mordisquear mi cráneo, seguro que fue eso, porque mientras más sabia de ella, más me intrigaba, sería estúpido decir que me gustaba, seria tan... absurdo decir que me enamore, pero si paso algo, si sentí que había una conexión, fue un vaivén de suspiros y exclamaciones, un manantial de sonrisas y hormigueos, fue algo bonito, perdón, no tengo otra palabra, se que se la merece, aunque realmente no "fue" como cabalmente se define "fue", será una de las cosas más sublimes que me han pasado.
Lo demás es pura historia, puro cuento que no tuvo final, no es que fuese bueno o malo, simplemente no tuvo final pues nunca empezó, realmente al Diablo quizá le pareció divertido, pero ¡cabron! si me estas leyendo créeme que no lo fue.
Es curioso ahora escribo con las manos, media cabeza y un poco del torso, lo demás los demonios ya se lo comieron, quien iba pensar que resultaran tan buenos, quizá mañana terminen de devorarme, en verdad me urge. Muchas veces cargamos con ellos, esperando que con ser buenos y hacer crecer nuestras alas, se terminen alejando, pero al final ellos las devoran de nuevo. Aprendí que no es solo cuestión de ser más bueno eso nunca es suficiente, hay que dejar que nos devoren, que nos borren, que supriman toda carne de nuestro ser, sólo así podemos nacer de nuevo. Mañana quizá vuelva a nacer o tal vez sea en un mes o en año, mi carne se esta acabando, ahora sólo redacto con una mano, un cuarto del cráneo y la mitad del ojo, por lo cual les cuento un ultimo secreto: "Ellos nunca devoran las plumas de tus alas, les causan indigestión, por eso cada que algo te dañe y pierdas un poco de tu fe, conserva tus plumas, pues al final de ellas volvemos a nacer"